Mostrando entradas con la etiqueta fotografía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta fotografía. Mostrar todas las entradas

La Foto de la Semana 01-02-2015: "Gandalf"


Gandalf es un personaje ficticio perteneciente al legendarium del escritor británico J. R. R. Tolkien. Es uno de los principales personajes de las novelas El hobbit y El Señor de los Anillos, aunque también aparece en El Silmarillion, donde se narran sus orígenes. Es conocido por muchos nombres en la Tierra Media; según sus propias palabras: «Mithrandir entre los elfos, Tharkún para los enanos; Olórin era en mi juventud en el Oeste que nadie recuerda, Incánus en el Sur, Gandalf en el Norte; al Este nunca voy».
Es un istar (‘mago’), uno de los espíritus maia enviados a la Tierra Media durante la Tercera Edad del Sol para ayudar a sus habitantes en la lucha contra el «señor oscuro» Sauron. Allí adoptó el aspecto de un anciano de barba luenga y de color blanca grisácea, vestido con una gran capa gris, un sombrero puntiagudo de color azul y un gran cayado.
Gandalf es considerado junto a Merlín como el estereotipo del mago de la cultura occidental
...
 ____________________________
 En la mitología nórdica, Gandalf es un Dvergr (enano), que aparece en el poema Völuspá de la Edda poética.1 El nombre deriva de las palabras en nórdico antiguo gandr (vara) y álfr (elfo), es decir, un espíritu protector que esgrime una vara, tal vez una varita mágica. Cf. lat. "gandus", esp. "gandul".
En sus obras ficticias, J. R. R. Tolkien nombró a su mago Gandalf por el Dvergr.



Fotografía: Edurne Iza. Puerto de Amsterdam  (Datos de disparo: f/8.0 ; 1/250 ; 200 ISO)

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Gandalf
             http://es.wikipedia.org/wiki/Gandalf_%28mitolog%C3%ADa%29
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la Semana 25-01-2015: "Por primera vez"


Lo habían conseguido. María y Elena. Como tantas otras mujeres sexagenarias, eran invisibles. Nombres normales y vidas corrientes. Se casaron jóvenes, tuvieron hijos, los criaron, éstos se independizaron, soportaron unas cuantas infidelidades de sus maridos, algún que otro grito por protestar o por tener la osadía de aspirar a una vida plena con más reconocimiento que el mero "gracias mamá, la cena estaba muy buena" o el "ponme más que tengo hambre". Sus vidas establecidas según las normas de la sociedad transcurrieron sin mayores sorpresas. Siempre hicieron lo que se esperaba de ellas, incluso al enviudar, mantuvieron un riguroso respeto a sus fallecidos esposos durante más de un año, en el que no se permitieron apenas sonreír o disfrutar de actividades sociales. En sus tardes de solitarios pensamientos se hicieron compañía. Descubrieron que a pocas manzanas de distancia, sin apenas haber intimado en tantos años, habían tenido vidas paralelas. De hecho, llegaron a la conclusión de que la mayoría de las mujeres que les rodeaban habían tenido las mismas vidas que ellas. Y de ese modo copita de jerez tras copita de jerez y mano de mus tras otra, Elena y María se hicieron amigas y decidieron compartir cada tarde una primera vez. Así, por primera, vez fueron al fútbol. Por primera vez vieron borroso el amanecer tomando chocolate con churros después de una noche de fiesta y alcohol. Por primera vez ligaron en una discoteca y amanecieron junto a un hombre que no se tiraba pedos. Por primera vez pidieron comida china de entrega a domicilio y la comieron con palillos desechables directamente de los recipientes de cartón, igual que en las películas americanas. Por primera vez se fueron de compras juntas y como dos quinceañeras adquirieron dos paraguas iguales y de color morado como símbolo de su hermandad. Por primera vez... Descubrieron lo que era vivir sin pasar cuentas a nadie. 
Jugaban cada semana a la quiniela y un día acertaron un pleno al quince. Así que por primera vez, tomaron sus dos paraguas iguales y morados y se fueron de viaje a recorrer todas aquellas ciudades que siempre habían soñado visitar.



Fotografía: Edurne Iza (Datos de disparo: f/2.0 ; 1/250 ; 200 ISO)
Texto: Onintza Otamendi Iza

Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 18-01-2015: "Un fuerte aplauso para los caricaturistas del mundo"

Tener la capacidad de reírse de uno mismo es saludable. Exagerar aquello que nos hace especiales es un modo de reconocer precisamente eso, lo que nos hace diferentes a otros grupos humanos. Una nariz pronunciada, un acento marcado e identificativo de un país en concreto, un gusto alimenticio y sí, por qué no, también temas más personales como creencias religiosas, inclinaciones sexuales o políticas. Por ello, el oficio de caricaturista es y será imprescindible en nuestra sociedad, porque nadie, bajo ningún concepto o circunstancia, debería jamás olvidar que aquello que como seres humanos nos representa y distingue de los demás no nos da el derecho a sentirnos por encima del resto. Políticos, representantes religiosos, personalidades del cine o la música y ciudadanos de a pie. Cada uno de nosotros es único y especial, es cierto, pero dentro de esa exclusividad, todos deberíamos tener los mismos derechos fundamentales. Así pues, sonriamos ante una caricatura y aplaudamos al artista capaz de captar y plasmar esa esencia única impresa en nuestro ADN.




Fotografía: Edurne Iza (Datos de disparo: f/4.0 ; 1/250 ; 200 ISO)

Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 11-01-2015: "Sobre ruedas"


Arranca un nuevo año. Tenemos la mente llena de nuevas y mejores intenciones y propósitos que el año anterior. Doce meses para cumplirlos o trescientos sesenta y cinco días para fustigarnos por no haberlo hecho. En realidad algunas de esas promesas que nos hacemos cada principio de calendario, se repiten una y otra vez. Son como uno de esos coches antiguos que perviven aparcados en las calles de nuestras ciudades. Clásicos de la historia conviviendo con el progreso y los nuevos modelos. A pesar de pertenecer a otra época, de ser un retal de otra era, no queremos deshacernos de ellos, porque de algún modo nos han acompañado hasta aquí, en el largo camino de nuestras vidas. ¿Qué sería un inicio de año sin el firme propósito de comenzar a ir al gimnasio, dejar de fumar o hacer dieta?. El Fiat 500L marcó a varias generaciones y al verlo hoy estacionado junto a poderosos vehículos de tecnología alemana, me doy cuenta que a lo largo de todos estos años, sólo ha ganado en glamour, encanto y un exquisito halo de romántica nostalgia. Exactamente igual que todos los buenos propósitos con los que arrancamos cada Enero, aunque rara vez lleguemos a hacerlos realidad.




Fotografía: Edurne Iza (Datos de disparo: f/2.0 ; 1/125 ; 400 ISO)
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La foto de la semana 04-01-2015: "Amsterdam"

Ámsterdam5 o Amsterdam, según la pronunciación etimológica (Acerca de este sonido Amsterdam [ɑmstər'dɑm]), es la capital oficial de los Países Bajos. La ciudad está situada entre la bahía del IJ, al norte, y a las orillas del río Amstel, al sureste. Fue fundada en el siglo XII como un pequeño pueblo pesquero. Sin embargo, en la actualidad es la ciudad más grande del país y un gran centro financiero y cultural de proyección internacional.
Tiene una población de unos 810 000 habitantes y en su área metropolitana residen aproximadamente 1,5 millones. Cabe destacar que Ámsterdam forma parte de la gran conurbación neerlandesa llamada Randstad (junto con las ciudades de La Haya, Róterdam y Utrecht), que cuenta con más de 6,5 millones de habitantes. Este núcleo es una de las conurbaciones más grandes de Europa.
El centro histórico de la ciudad fue construido en gran parte en el siglo XVII y es hoy en día uno de los centros históricos más grandes de Europa. En aquella época se construyeron una serie de canales semicirculares alrededor del casco antiguo ya existente de la ciudad. Después se edificaron las nuevas calles que ahora habían sido creadas con casas y almacenes en un estilo típico neerlandés que es una de las imágenes más famosas de Ámsterdam y del país. Al igual que otras ciudades de Europa septentrional con abundancia de agua, como Brujas, Hamburgo y Estocolmo, es conocida coloquialmente como la «Venecia del norte».
Aunque durante casi toda su historia (excepto entre 1808–1810) ha sido la capital oficial de los Países Bajos, nunca ha sido la sede de la justicia, el gobierno o el parlamento neerlandés, ya que todos estos órganos se encuentran en la ciudad de La Haya, que por tanto es la principal ciudad del país con respecto a política y justicia. Ámsterdam tampoco es la capital de la provincia de Holanda Septentrional, que siempre ha sido Haarlem.

Fotografía: Edurne Iza
Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/%C3%81msterdam


Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 21-12-2014: "Felicidad"

  Merry Christmas & Happy New Year for everybody



Matilde era desgraciada. Su vida había sido, desde siempre, una consecución de despropósitos. Su corazón no bombeaba sangre, sólo lágrimas. Cada mañana al abrir los ojos, Matilde lloraba. Al principio lloraba a causa de sus problemas económicos, porque se sentía sola, no tenía trabajo, porque apenas podía alimentarse. Su situación mejoró cuando respondió al anuncio del supermercado de la esquina y la contrataron como cajera. Sin embargo, cada mañana al abrir los ojos, Matilde lloraba. Consiguió mudarse a un barrio mejor, a su mesa cada noche servía una cena caliente, pudo comprarse algo de ropa. Pero cada mañana al abrir los ojos, Matilde lloraba. Ya no recordaba por qué, pero continuaba llorando de manera rutinaria igual que se lavaba los dientes. Era el día de Navidad y Matilde, no tenía que trabajar. Sonó el despertador conectado con la emisora de radio local y tocaban su canción favorita. Ese día Matilde se olvidó de llorar. Lo mismo sucedió la siguiente mañana y la otra. Hasta que un día se despertó y una enorme sonrisa iluminó su rostro. Se sentía feliz y ni siquiera recordaba los millones de lágrimas derramadas.
A menudo utilizamos de forma casi inconsciente la palabra felicidad. Deseamos felices fiestas, decimos que tenemos una vida feliz, que somos felices. Que esto o aquello nos hace felices. 
Sin embargo la felicidad es mucho más etérea. Sólo tiene sentido en un determinado espacio e instante temporal. Es efímera, abstracta, intangible e incontable. 
Hay quien hace de ella el propósito de su vida. Hay quien desperdicia su vida buscándola y muere en el intento. En realidad, la felicidad es un sentimiento tan profundo y satisfactorio que apenas unos segundos nos compensan una larga serie de penurias. Por ello, me atrevería a definir la felicidad como un instante fugaz de satisfacción infinita. 
Así, para el nuevo año, desde Fotografía Edurne Iza, os deseamos dos mil quince diminutos e intensos instantes de felicidad. Doce meses de vida plena. Trescientos sesenta y cinco amaneceres con vuestra canción favorita en la radio. Que si una pena os inunda  de tristeza, a la mañana siguiente os olvidéis de llorar. Que vuestro corazón no bombee lágrimas si no sonrisas y buenas vibraciones. Que en este nuevo año os convirtáis en recolectores de instantes felices.




Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 14-12-2014: "Vaquebra"

El vaquebra es en realidad un personaje real y que inunda nuestras vidas. En el caso de la imagen que nos ocupa es una vaca con aspiraciones de cebra, a la que hemos denominado vaquebra. Sin embargo, en nuestro día a día estamos rodeados de ellos. El vecino que conduce un coche de alta gama y envía a sus hijos a colegios que no puede pagar. Que viste ropa de marca pero debe dinero a amigos y compañeros de trabajo, por no decir que el banco le ha cancelado todas sus tarjetas, es un vaquebra. 
También los encontramos en el trabajo. Son estos personajillos de tres al cuarto que gesticulan ampliamente para cubrir los espacios que la triste realidad de sus vidas dejan al descubierto. Los que inflan su currículum diciendo por ejemplo "empresario del sector de la comunicación" cuando en realidad tienen la franquicia de un kiosco de prensa. Directivo hostelero, el que regenta una caravana móvil que es a su vez su vivienda y la churrería de la esquina.
No me malinterpretéis, todas las anteriores son profesiones muy loables, válgame Dios, lo que es una pena es no poder decir, soy churrero o tengo un kiosco. En el fondo los vaquebras sufren mucho. No quisiera encontrarme bajo su piel, y no por lo de las rayas que hoy en día en la Pasarela Gaudí, Cibeles o Milano están muy de moda, tanto rayas como topos. Y ya que estamos puestos con la simbología animal, más ciego que un topo habría que estar para no identificar a un vaquebra.
En fin, estoy segura de que ahora que les hemos puesto nombre si miráis a vuestro alrededor reconocéis a más de uno y de que la próxima vez que alguien os pregunte dónde vais a pasar las vacaciones de Navidad, antes de contestar "en una cabaña en la nieve, en un pueblecito de las montañas", reconoceréis qué vais a visitar a la familia, que vive en un pueblo perdido del que todos los jóvenes huyeron hace décadas por no existir futuro profesional.

Moraleja: seas vaca, cebra o topo... Nunca te avergüences de quien en realidad eres. La belleza está en ser auténtico. 



Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 07-12-2014: "La luna y la güadaña"

Luna soñaba con un amor verdadero. Pasaba noches y días imaginando encontrar a quien le aceptara tal y como era. Con sus luces y sus sombras. Con su belleza radiante y con su cara oculta. Al fin y al cabo, ¿quién no la tiene en esta vida? pensaba ella para sus adentros. La única diferencia es que unos lo muestran y otros no. Hay quien valientemente enseña lo mejor y lo peor de sí mismo y quien atraviesa este mundo como si de un escenario de teatro se tratara y el lema "el espectáculo debe continuar" domina sus vidas. Luna era consecuente con su forma de ser. Quizá mejor, quizá peor, no estaba interesada en juzgarlo, tan sólo se comportaba conforme su ética le guiaba.

Un día Luna conoció a un hombre siniestro. Vestía de negro y portaba una enorme y afilada guadaña en su mano derecha. El hombre aterrorizaba a Luna, al tiempo que la llenaba de intriga y curiosidad. El desconocido le prometió lo que a ella le parecía imposible. Le ofreció presentarle a esa persona especial que llevaba toda su vida esperando. Leyendo entre las líneas de novelas caballerescas y escudriñando en las caras de cada nuevo vecino, de los viandantes que se cruzaban con ella en los semáforos de la ciudad. ¿A cambio de qué? preguntó inquisitiva, No soy tonta, ¿sabe?. 

 que eres una muchacha muy inteligente y por eso te hago la propuesta a ti y no a cualquiera de los otros cientos de chicas con las que me cruzo por la calle cada día. Lo único que te pediré a cambio es que aceptes que el Sol gire en torno a tí e ilumine tus días. A cambio tu iluminarás sus noches.

La chica estaba algo confundida, no entendía exactamente los términos del trato pero antes de que pudiera profundizar en las condiciones el hombre le mostró la imagen de una pareja feliz. Ellos no llegan a casa y están solos. Se tienen el uno al otro. Comparten alegrías y tristezas, son una familia, construyen juntos su futuro. ¿No es eso lo que anhelas joven Luna?.

Antes de que el hombre terminara sus palabras Luna se dejó llevar por el profundo sentimiento de abandono y contestó tajante. Sí, acepto. 

El hombre esbozó una malévola sonrisa y puso frente a Luna una vida perfecta. De pronto tenía una preciosa casa, cenaba junto al hombre de sus sueños y compartía una existencia tanto o más feliz que la que tantas veces había imaginado. Disfrutó de las horas más maravillosas de su vida. Sin embargo, apenas los primeros rayos del sol brillaron en el firmamento el timbre de la puerta sonó con insistencia. Aún somnolienta abrió y se encontró en el umbral al oscuro individuo. No tuvo tiempo de reaccionar cuando él blandió su enorme y afilada guadaña en el aire y dibujando movimientos rítmicos y violentos se acercó tanto a Luna que ésta comenzó a temblar. La negra figura emitió un grito ensordecedor y la guadaña cayó implacable sobre la joven. No hubo sangre ni su cuerpo quedó cercenado. Tan sólo comenzó a girar a gran velocidad y se elevó hasta el cielo ocupando la exacta posición de la Luna. Ese fue su triste destino, pasar los días iluminada por el Sol dando brillo a sus noches. 

Cuentan los más ancianos que en su cara oculta, Luna llora lamentando su error. Ya no tiene sueños. Solo tiene días y noches y una infinita soledad desde la cual observa a hombres y mujeres ser felices y desgraciados, perseguir sus ilusiones, triunfar y fracasar. Ser lo que ella nunca podrá volver a ser...Humanos.



Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 30-11-2014: "Noches de fuego y flores"

Cuando el sol acaricia el horizonte, todo cuanto nuestro ojos alcanzan a ver se tiñe de fuego. El día se extingue entre sus llamas y todas la criaturas diurnas apuran los últimos minutos de actividad. Las flores estiran sus pétalos atrapando los últimos resquicios de calor y energía, antes de plegarse sobre sí mismas y recogerse hasta el amanecer. Existe un instante en que el firmamento se ha ahogado en las tinieblas y tan sólo quedan unas llamas lejanas que reflejan en las últimas flores despiertas en la pradera. Ese instante, esa magia es casi tan difícil de capturar como la Aurora Boreal. Hoy "La Foto de la semana" os regala Noches de fuego y flores, un instante mágico atrapado para siempre en forma de fotografía. 


Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 23-11-2014: "El limpiador de fuentes"

Su vida transcurría monótona. Se enfundaba sus pantalones de agua, se introducía en las fuentes de los parques de la ciudad y con los aparejos adecuados se encargaba de que los fondos de las fuentes estuvieran limpios y parecieran atractivos a los visitantes. Tenía un calendario, por distritos para limpiar en orden las fuentes públicas. En sus muchos años de oficio había encontrado prácticamente de todo sumergido en los fondos: relojes, anillos, colillas, basuras de todo tipo y por supuesto monedas. Era lunes y le tocaba el distrito sur de la ciudad. Una enorme fuente, casi estanque, de poca profundidad y larga extensión. Estaba bastante limpia en comparación al mes anterior, lo cual le permitía identificar de forma muy rápida los objetos a eliminar. Vislumbró un brillo a unos metros de donde se encontraba. Era una especie de lámina reflectante que navegaba semi hundida y proyectaba llamativos reflejos en su lento vaivén. La pescó con el bichero y la sacó del agua. Escuchó entonces un grito estremecedor, al tiempo que el brillante papel perdía sus colores y se arrugaba como si se retorciera de dolor. En un acto reflejo, sumergió de nuevo el bichero y pudo escuchar un susurro ahogado que decía "gracias". Confundido, realizó la misma operación tres veces más y tres veces se repitieron los alaridos de angustia y posteriormente los murmullos de agradecimiento. A punto de pensar que estaba perdiendo la cabeza, soltó el bichero y se acercó hasta el papel que brillaba ahora en todo su esplendor. Lo tomó en su mano con cuidado de no sacarlo del agua y se agachó hasta la superficie del agua para contemplarlo mejor. Era precioso. Una serie de líneas curvas que dibujaban graciosamente formas circulares. Dorada, plateada, cobriza... Y en el centro perfilada una boca. Observó durante unos segundos hasta que la boca se movió. 
- Hola limpiador de fuentes.
- Hola, respondió tímidamente mientras miraba a ambos lados para comprobar que no hubiera nadie cerca que pudiera pensar que había perdido la razón.
- Soy la voz de tus sueños imposibles
- No entiendo...
- Puedes contarme tus sueños y haré lo imposible por hacerlos realidad
- ¿Como una lámpara de Aladino?
- ¡Un respeto! Las comparaciones son odiosas
- Disculpa, no pretendía ofenderte
- Bueno, centrémonos. Puedes pedirme tres deseos: uno justo, uno que no sea para ti y otro imposible. Si los formulas adecuadamente, si no muestras avaricia ni egoísmo, haré realidad los tres. Tienes tres minutos, uno por deseo.
A estas alturas el limpiador de fuentes estaba tan concentrado en seleccionar correctamente sus deseos que se abstrajo por completo de su entorno.
- El deseo justo es tener un trabajo que me permita envejecer y morir con dignidad.
- Ummm muy interesante este deseo. Continúa.
- El deseo que no es para mí... Que se descubra la indiscutible cura contra el cáncer. 
- Me gusta este segundo deseo, dijo la enorme boca esbozando una sonrisa
- Y el imposible... que la gente en lugar de tirar basura y desperdicios a las fuentes, sólo lanzara palabras 
- ¿Palabras?
- Sí, de ese modo los limpiadores de fuentes sólo tendrían que recoger sentimientos: olvídame, perdón, te amo, soy libre, he terminado mis estudios... ¿No crees que sería precioso? En lugar de eso, recogen billetes de autobús y bolsas de patatas fritas.
- Está bien. Tus deseos me parecen justos. Déjame pensarlo.
La lámina se movió dulcemente en las aguas del estanque, brillaba con mayor intensidad que nunca los reflejos tenían al joven completamente maravillado. De pronto, la lámina cayó hasta lo más profundo del estanque y desapareció.
El joven se quedó perplejo mirando a su alrededor intentando comprender qué había sucedido. ¿Habría sido el calor de aquel día de Agosto?. Quizá debía tomarse en serio lo de beber más agua.
Confundido y por qué no decirlo, sí, decepcionado continuó trabajando. A la hora habitual recogió sus herramientas y se marchó a casa. Cenó frugalmente y rendido por una profunda y pesada sensación de somnolencia se fue a dormir pronto.
Amaneció en una cama que no reconocía, en un dormitorio que no recordaba y rodeado de sonidos que no le resultaban familiares. Se levantó de la cama y se percató de que a pesar de no reconocer nada de lo que le rodeaba, sus movimientos eran los de alguien habituado a ese entorno. Fue al baño y encontró a la primera la espuma de afeitar, el gel o la pasta de dientes. Supo bajar las escaleras, dirigirse a la cocina y preparar el café... Tomó las llaves de su flamante Mercedes y lo condujo sin dudas hasta el garaje del Hospital Central. Tomó el ascensor, saludó a Natalia, la secretaria de la planta de radiología cuando se cruzó con ella en el pasillo. Abrió la puerta de su despacho, colocó el maletín en su lugar habitual, encendió el ordenador, Mónica, su secretaria saludó amablemente al tiempo que le leía la agenda del día:
- Buenos días doctor Fuentes
- Buenos días Mónica
- Para hoy tenemos la presentación de la cura contra el cáncer a las once en el despacho presidencial, seguida de la rueda de prensa y el convite para políticos y personalidades del mundo de la ciencia. A las cinco de la tarde la inauguración de la fuente de las palabras.

Atónito escuchó las palabras de la joven secretaria tratando de ordenar sus ideas. Tener un trabajo que me permita envejecer y morir con dignidad, era un doctor de prestigio, el doctor Fuentes. Que se descubra la indiscutible cura contra el cáncer, él era el científico que había descubierto la solución a tan cruel enfermedad. Que la gente en lugar de tirar basura y desperdicios a las fuentes, sólo lanzara palabras, iba a inaugurar aquella misma tarde la Fuente de las Palabras.

- Gracias, masculló el hombre visualizando la lámina brillante que cambió su vida.
- De nada, contestó Mónica ajena a la realidad, ¿un café para empezar el día doctor?





Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la Semana 16-11-2014: "Te esperaré"

Una pequeña marca en la gruesa capa de nieve que cubría el banco del parque es todo cuanto quedó de él, amaneció congelado una mañana del mes de Febrero. Ella le pidió tiempo para resolver unos asuntos y el respondió "Te esperaré". Y esperó. Los meses del calendario cayeron como las hojas en otoño y él esperó. Cambiaron las modas, las tendencias políticas en el gobierno. El equipo más pobre del campeonato ganó la liga de fútbol y él, continuó esperando. No hubo enfermedad, crisis, noticia o inclemencia climática que hicieran que no acudiera a su cita en el banco del parque puntualmente cada tarde a las cinco. Ni un minuto más, ni uno menos. Siempre con la misma ilusión, con idéntico gusanillo en el estómago. Hoy es el día, se decía a sí mismo. Hoy volveré a ver su sonrisa franca e inocente. Y esperaba hasta que la noche lo empujaba a patadas hacia su casa. Bueno, no  importa, seguro que mañana aparece, repetía para sus adentros. Pero al día siguiente la historia se repetía una y otra y otra vez. La juventud abandonó su cuerpo, el color se disolvió en sus cabellos ya grises como el acero. Sin embargo, la confianza de volver a ver a su amada y la fe ciega en su promesa permanecían aferradas a su corazón con la misma intensidad que aquella mañana de Agosto en la que ella besó sus labios por última vez, fijó sus ojos en los del joven y se desvaneció entre la multitud que paseaba por los senderos arbolados. 
Valentina tenía una misión que realizar antes de poder ser feliz junto a su enamorado. Debía entregar unos documentos al jefe de la guardia nacional. Eran papeles de suma importancia que contenían los detalles del próximo movimiento de tropas que inclinaría el resultado de la guerra hacia uno u otro bando. Su cometido era tan secreto que nadie en su familia, amigos ni siquiera el amor de su vida conocían sus intenciones. Valentina fue descubierta unos minutos después de la entrega del sobre. Fue capturada y torturada durante días para obtener la información que ella había protegido con su vida. No pronunció palabra. Cuando sus captores se dieron por vencidos decidieron encerrarla en lo más profundo de una celda húmeda y oscura. Allí permaneció durante veintitrés días y sus correspondientes noches, sin apenas agua ni comida, sus heridas se infectaron y su cuerpo se fue debilitando hasta que la vida se escapó de entre sus huesos. Nunca supo que a la mañana del vigésimo cuarto día desde su cautiverio, gracias a su heroica acción, acabó la guerra. Habían ganado, pero Valentina murió unas horas antes. Durante sus veintitrés días de agonía, entre delirios y fiebres, sólo imaginaba regresar y cumplir con su promesa. Y así, visualizando el banco del parque expiró. Cincuenta y dos años después, tras haber pasado diecinueve mil ciento cuatro tardes sentado en aquel banco, su corazón dejó de latir pensando en Valentina. Él le dijo "Te esperaré"... Y esperó.



Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 09-11-2014: "No estamos solos"


Nos movemos por el mundo tomando decisiones a cada instante. Los hay con familia y sin ella. Los que van de la mano de sus parejas o llevan en brazos a sus hijos. Están ermitaños, los sociables, los eternos solteros, los que quisieran pareja y no la encuentran, los que tienen pareja y están hartos de ella... 

Sin embargo, no importa cuán solos nos podamos sentir en un momento dado de la vida, en realidad nunca lo estamos. Nos acompañan nuestros pensamientos, recuerdos, nuestros planes de futuro. Caminan junto a nosotros todos los sueños que nos hacen sonreír y mirar hacia adelante cada mañana. Las malas experiencias nos ayudan a no repetir los errores del pasado. Los éxitos a confiar en nuestro instinto para tomar nuevas decisiones. 

Por último, pero no menos importante, nuestra sombra. Ella es el motivo por el que no olvidamos que no avanzamos solos en este mundo. Siempre está allí al doblar cada esquina. A veces avanza por delante de nuestro paso y otras nos sigue sigilosa. No protesta, no se enfada, no sonríe, ni llora. Simplemente nos hace compañía a su manera.  



Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.


La Foto de la semana 02-11-2014: "La vida pasa por ser una pasa"


Efectivamente, la vida pasa por convertirse en una pasa. Hoy en día, hay quien vive profundamente obsesionado por la imagen. Lo cual, está muy bien, siempre que no se traspasen ciertas barreras. La verdad, resulta un tanto patético, pasear por ciertos locales frecuentados por gente de clase media alta y ver las verdaderas atrocidades, a las que someten sus cuerpos por parecer unos años más jóvenes. Rostros estirados, labios, pechos y nalgas de silicona. Con lo bonito que es envejecer con dignidad, se convierten en lamentables caricaturas de sí mismos. El estiramiento de la piel, para camuflar las arrugas, se denomina ritidectomía. He investigado un poco sobre este proceso y se me han puesto los pelos de punta ,al ver la imagen con la que Wikipedia explica el proceso, podéis echar un vistazo aquí http://es.wikipedia.org/wiki/Ritidectom%C3%ADa. Luego viene la recuperación. Los hematomas, molestias y malestares se prolongan durante tres a cuatro semanas. Lo más triste de todo, es que al final la naturaleza hace prevalecer su poder y quienes se han sometido a este tipo de cirugía, deben operarse, una y otra y otra vez más para mantener ese aspecto de jovenzuelos con movilidad limitada. Porque por mucho que alisen su piel, sus huesos y músculos envejecen, se entumecen y pierden flexibilidad. Pasados unos años, ya no queda más piel para estirar y los rostros comienzan a deformarse, a perder sus facciones originales y asimilar una imagen artificial y estereotipada. Por eso yo me quedo con aquella mítica frase de "La arruga es bella". Apoyo a los que reivindican su edad, por lo mucho que les ha costado llegar a ella, y defiendo que la vida pasa, por ser una pasa.


Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 26-10-2014: "¿Diferente o mejor?"

¿Es mejor ser diferente o siendo diferente se consigue ser mejor? gran pregunta que no deja de ser la esencia moral y el mensaje de una tradicional historia como la de El patito feo.
Los estereotipos sociales y culturales nos enseñan a ser los mejores. Ganar el partido de fútbol, sacar un diez en el examen, ser el primero en el concurso de preguntas y respuestas...Desde que adquirimos uso de razón se nos enseña a ser  los mejores en aquello a lo que nos vayamos a dedicar. Se imprime en nuestra piel como un tatuaje indeleble la competitividad y el espíritu ganador. Sin darnos cuenta, nos convertimos en un producto clónico. Niños que quieren ser los primeros, adultos que desean ganar más, ancianos solos y llenos de frustración por una vida perdida.
Al mismo tiempo, desde la más tierna infancia aprendemos a mirar de soslayo y con cierto recelo a los que son diferentes. A quienes se atreven a proponer ideas nuevas, innovadoras y que se salen de lo establecido. 
Pero no perdamos de vista que diferente no es más que una cuestión de tiempo. El iPhone era novedoso cuando Apple lo lanzó al mercado y ahora tras todas las copias asiáticas, no es más que un smartphone. Picasso, Dalí, Gaudí, Marcel Duchamp, Helmut Newton, Man Ray, Moholy-Nagy... Fueron rompedores y crearon escuela, pero ya no sorprenden como el primer día, aunque sigamos admirándolos.
Si ahora unimos ambos conceptos, descubriremos que quienes se atrevieron a burlar los estereotipos de su tiempo y a ser diferentes consiguieron ser reconocidos como los mejores en su disciplina. Sin embargo, no fueron los ganadores desde un principio, tuvieron que pasar calamidades, sufrir la desaprobación de la sociedad, vivir en la miseria, en algunos casos, para finalmente obtener el reconocimiento popular y general.
Así pues la pregunta final sería ¿prefieres ser un caballo ganador o un patito de plumas revueltas que algún día se convertirá en cisne?.
Llamadme romántica, pero yo... apuesto por ser diferente.


Fotografía: Edurne Iza 
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta fotografía libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 19-10-2014: "Óxido, la sangre de los marinos"


Cuenta una vieja leyenda marinera, que un anciano capitán de barco, murió al timón de su pequeño mercante en una noche de tempestad. El hombre había navegado a lo largo y ancho de los siete mares desde que apenas podía mantenerse en pie. Había sido grumete, marmitón, cocinero y timonel antes de alzarse con el rango de capitán. Quienes le conocían aseguraban que había renunciado a disfrutar de un gran amor por el salado regusto de la mar. Contaban que hubo una muchacha dispuesta a esperarle al regreso de cada uno de sus viajes, a criar a sus hijos en el amor proyectado del padre ausente, a superar escasez, incertidumbre y soledad a cambio de disfrutar de robados momentos de felicidad cuando alguna marea trajera a su esposo a casa. Sin embargo, pese a todos los sacrificios que su amada estaba preparada para realizar, el por aquel entonces joven lobo de mar, prefirió unirse para siempre al vaivén de las olas, a la espuma que rompe contra los arrecifes, a la desesperación de la calma chicha y la angustia del temporal. Pasó su existencia a bordo de alguna embarcación. Al principio como tripulante, más tarde al mando de su propia nave. Sin apenas darse cuenta su corazón se fue secando... igual que la carne en salazón. La noche en que una ola gigantesca le arrebató el último soplo de aliento, su cuerpo inerte fue zarandeado y arrastrado hasta lo más profundo de los abismos. Su corazón se deshizo en millones de partículas microscópicas que fueron diseminadas por las corrientes marinas de un extremo al otro de nuestro planeta. Por eso los más ancianos afirman que los hierros se oxidan al contacto con el agua de mar, para recordarnos que está impregnada con la sangre de todos aquellos que le entregaron su vida. De todos los corazones que repartieron ínfimas gotas de su sangre entre sus aguas para generar más y más amantes de su inmensidad indomable.



Fotografía: Edurne Iza 
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta fotografía libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.

La Foto de la semana 12-10-2014: "Él nunca lo haría"



Nos llenamos la boca de decir que el perro es el mejor amigo del hombre. Que los tratamos como a un miembro más de la familia. Afortunadamente así es en muchos casos, pero no en todos. Aún no he podido recuperarme del impacto del caso Excalibur. Parece imposible que en pleno siglo XXI, en Europa, rodeados de organizaciones de protección de los derechos de esto y de aquello, de innovación, tecnología, investigación... En una era en la que estamos a punto de encontrar planetas alternativos con atmósferas adecuadas para la vida humana, en la que se realizan desarrollos tecnológicos al límite de la ciencia ficción, la primera medida que se tome sea sacrificar a un perro que pudiera estar contaminado con un virus, del que no sabemos siquiera cómo reacciona en otros mamíferos. Quizá a las "autoridades" no se les ocurriera pensar en una cuarentena, en observar, estudiar, analizar, aprender incluso de cómo este virus que está acechando la seguridad de la raza humana se comporta. Por supuesto, era mucho más sencillo sacrificar al animal, sin siquiera plantearse segundas opciones. Tal y como han transcurrido los acontecimientos, más suena a un intento absolutamente desafortunado y poco inteligente de lavar la imagen de un comportamiento tercermundista y poco profesional de los políticos del país, en el tratamiento de esta amenaza llamada Ébola. 
¿Dónde quedan ahora las campañas de concienciación contra el abandono o el maltrato a los animales como la tan famosa "Él nunca lo haría"?. Ahora más que nunca, han tenido la oportunidad de mostrar al mundo su verdadera conciencia hacia los animales y lo han hecho. Del modo más triste y nefasto posible, pero ha quedado muy claro cuál es el camino que emprende un país en manos de incompetentes y descerebrados. Emprende el camino de poner en riesgo muchas vidas por negligencias encadenadas, el camino de la falta de respeto hacia el entorno, el medio ambiente y los seres con los que compartimos este planeta. El camino del autoritarismo, de la ignorancia, la mentira, la improvisación, la injusticia. En días como hoy... Me avergüenzo del ser humano, me avergüenzo de ser humana.
Fotografía: Edurne IzaTexto: Onintza Otamendi IzaPuedes descargarte esta fotografía libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.









La Foto de la semana 05-10-2014: "Se lo llevó una ola"




Hijo y nieto de pescadores, Ernesto no pudo si no continuar la tradición familiar y dedicarse a surcar los mares en busca de una captura sustanciosa que le permitiera mantener a los suyos. Una noche de invierno, de esas en las que el mar se transforma en una bestia indomable, su padre no regresó a casa. A los pocos días, su barco fue encontrado destrozado contra unos arrecifes cercanos y ni rastro de la tripulación. Ernesto se convirtió en cabeza de familia antes siquiera de tener edad para que le sirvieran una cerveza en un bar. El tiempo pasó rápido, sus músculos se desarrollaron pronto por el esfuerzo de manejar los aparejos y las redes y su piel se curtió por el sol y el salitre. Aún no llegaba a los veinte y ya llevaba escrita en el alma toda una enciclopedia de vicisitudes, aventuras y sufrimientos. Conoció a Marina, una joven dulce de mirada encantadora que lo hechizó desde el primer momento en que sus ojos se cruzaron. Ernesto era un joven de pocas palabras y profundos sentimientos y con Marina no necesitaban más que mirarse fijamente para comprender el uno lo que el otro necesitaba. Una tarde, después de mucho suplicar, Marina consiguió que Ernesto le dejara acompañarle en una de sus salidas. El tiempo era precioso, la mar en calma, una suave brisa acariciaba los rostros de los jóvenes que se dejaron llevar por la magia del momento. Sin embargo, el mar no avisa y las galernas de verano tampoco. Antes de que pudieran siquiera asegurar los aparejos, la brisa se convirtió en huracán y el espejo del agua en una violenta cordillera espumosa. Ernesto tomó todas las precauciones posibles, pero la mar crecía como un gigante furioso e incontrolable. En el preciso instante en que una enorme ola arrasó la cubierta y con ella absorbía a Marina hacia las profundas y oscuras aguas, el tiempo pareció detenerse y Ernesto vio aparecer frente a su embarcación una figura humana. Alto, robusto, con largos cabellos blancos parecía emerger del abismo y tocar las nubes con su cabeza. Con voz fiera se dirigió al para entonces aterrado muchacho:

- ¿Deseas salvar la vida de tu amada?
- ¡Más que nada en este mundo!
- Entonces, regálame tu corazón
- ¿Mi corazón? Pero...
- Haz lo que te ordeno o Marina morirá
- Acepto, acepto, pero por favor sálvala

Lo siguiente que Marina recuerda es despertar junto a Ernesto tendidos en la arena de una playa cercana. Restos del naufragio por todos lados pero ambos a salvo. Entusiasmada, casi sin dar crédito a su buena suerte, se abalanzó sobre el joven besando cada centímetro de su cara al tiempo que reía y canturreaba de alegría. El chico abrió los ojos, miró a la joven y ella se estremeció al comprobar que aquella no era la mirada dulce y llena de palabras que no necesitaban ser pronunciadas de la que ella se había enamorado. Sin emoción en su rostro ni en su gesto, Ernesto se levantó, tomó de la mano a la muchacha y regresó a casa como si nada hubiera sucedido. Sus vidas se convirtieron en un suceder de amaneceres y anocheceres. De tormentas y calmas. Tuvieron alegrías por las que nunca rieron y tristezas por las que jamás derramaron una lágrima. Ernesto se había convertido en un barco sin velas, en un cascaron que flotaba al antojo de los elementos. Marina, resignada, solía decir "no es su culpa, su corazón... se lo llevó una ola".



Fotografía: Edurne Iza en Calella de Palafrugell, Costa Brava, Girona, Catalunya.
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta fotografía libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.


La Foto de la semana 21-09-2014: "Alcantarillado"

Se denomina alcantarillado (de alcantarilla, diminutivo de la palabra hispano-árabe al-qánṭara (القنطرة), «el puentecito») o también red de alcantarillado, red de saneamiento o red de drenaje al sistema de estructuras y tuberías usado para la recogida y transporte de las aguas residuales de una población desde el lugar en que se generan hasta el sitio en que se vierten al medio natural o se tratan.
Las redes de alcantarillado son estructuras hidráulicas que funcionan a presión atmosférica, por gravedad. Sólo muy raramente, y por tramos breves, están constituidos por tuberías que trabajan bajo presión o por vacío. Normalmente están constituidas por conductos de sección circular, oval o compuesta, la mayoría de las veces enterrados bajo las vías públicas.

 La red de alcantarillado se considera un servicio básico, sin embargo la cobertura de estas redes en las ciudades de países en desarrollo es ínfima en relación con la cobertura de las redes de agua potable. Esto genera importantes problemas sanitarios. Durante mucho tiempo, la preocupación de las autoridades municipales o departamentales estaba más ocupada en construir redes de agua potable, dejando para un futuro indefinido la construcción de las redes de alcantarillado. Actualmente la existencia de redes de alcantarillado es un requisito para aprobar la construcción de nuevas urbanizaciones en la mayoría de las naciones.


El más antiguo alcantarillado de que se tiene referencia es el que fue construido en Nippur (India), alrededor del 3750 AC. Posteriormente en los centros poblados de Asia Menor y de Oriente Próximo utilizaron conductos de alfarería, (Creta, 1700 AC). En Atenas y Corinto, en la Grecia antigua, se construyeron verdaderos sistemas de alcantarillado. Se utilizaron canales rectangulares, cubiertos con losas planas (atarjeas, propiamente dichas), que eventualmente formaban parte del pavimento de las calles; a las atarjeas afluían otros conductos secundarios, formando verdaderas redes de alcantarillado.
Existen muchos relatos y descripciones de las alcantarillas de la antigüedad, quizás las más conocidas sean las de la antigua Roma, de París y de Londres, estas dos ultimas alcantarillas construidas en Europa y en los Estados Unidos, se dirigían fundamentalmente a la recolección de las aguas de lluvia. Las aguas usadas de origen humano solo comenzaran a ser conectadas a las alcantarillas en 1815 en Londres, en Boston a partir de 1833, y en París, solo a partir de 18801
El primer sistema moderno de alcantarillado se diseñó en Hamburgo en 1842, utilizando las más modernas teorías de la época, teniendo en cuenta las condiciones topográficas y las necesidades reales de la comunidad. Este hecho significó un espectacular avance, considerando que los principios fundamentales en que se basó el proyecto no se generalizaron hasta inicios de los 1900, y siguen vigentes en la actualidad.2

 Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Alcantarillado
 Fotografía: Edurne Iza. Tapa de registro en la localidad de Platja d'Aro, Catalunya



La Foto de la semana 14-09-2014: "La fábula del sastre y las tijeras"



Érase una vez una aldea rodeada de montañas en la que vivían dos jóvenes sastres. Ambos trabajaban como aprendices en el taller del señor Lino y soñaban con poseer, algún día, su propio atelier. Diseñaban trajes elegantes y vestidos glamurosos. Por sus manos pasaban las telas más selectas y al tocarlas su imaginación volaba hasta elevarles al reino de la fantasía, donde cualquier deseo podía convertirse en realidad.
Cada año, coincidiendo con las fiestas navideñas, se celebraba un sorteo de lotería. Era un acontecimiento importante, puesto que muchas familias depositaban sus esperanzas en el premio. Resultaba divertido, sobre todo para los más jóvenes y entusiastas, elucubrar acerca de viajes, casas, joyas y todo cuanto el boleto agraciado les permitiría disfrutar.
Los dos alfayates vivían en sendas habitaciones en la posada de la señora Mesón, famosa por su pulcritud y las deliciosas recetas que nacían en su cocina. Por las noches llegaban extenuados, tras un día repleto de dobladillos, pespuntes e hilvanes, se sentaban en una de las mesas de madera y disfrutaban de la cena. Su modesto sueldo, sólo alcanzó para comprar un décimo que compartieron y sujetaron con los ojos cerrados, mientras el bombo giraba y las bolas eran seleccionadas. Cuando el último número estuvo fuera, comprendieron que eran ellos, los humildes aspirantes a modisto, los portadores del billete ganador.
Pasada la confusión inicial, cada uno tomó decisiones para que su sueño, unas horas antes imposible de cumplir, se materializara. Así, en pocas semanas, la aldea contaba con otras dos sastrerías: Cremallera y Tijeras. Podríamos pensar que nuestros jóvenes amigos, no se esforzaron demasiado en escoger los nombres para sus establecimientos y sin embargo la historia demostró que no podían haber sido más apropiados, ya que la estrategia empresarial de cada uno, reflejaba exactamente lo mismo que los objetos seleccionados.
Cremallera ofrecía a sus clientes productos de alta calidad y basaba su éxito en las duras horas de trabajo y en seleccionar las mejores materias primas. Empleó numerosos recursos en la investigación de tejidos y técnicas de fabricación que le permitieran aumentar el número de prendas por hora. Sus ventas crecieron a la vez que su fama y pronto necesitó contratar un ayudante. Decidió pagarle un buen salario, que le permitiera vivir con comodidad. El joven empresario se sentía motivado y orgulloso de la marca que representaba y reinvertía gran parte de los beneficios en el progreso de su negocio.
Tijeras mientras tanto, optó por lanzar una colección de bajo coste. Adquirió maquinaria de segunda mano, algo anticuada pero muy económica. Elaboró la ropa con fibras sintéticas y consiguió unas ventas iniciales muy elevadas, por lo atractivo de sus precios. Sin embargo, tan pronto los consumidores comprobaron la escasa calidad de su producción, los pedidos disminuyeron en picado. Los que se interesaban por sus productos, buscaban el precio más bajo del mercado, con lo que la presión por reducir costes se fue incrementando. El dueño de Tijeras decidió cambiar de local a uno más reducido y alejado del centro. Contrató operarios para manejar las viejas máquinas. Sólo podía pagarles la mitad del sueldo estipulado, pero tenían que trabajar el doble, por lo que los empleados apenas permanecían en Tijeras un par de meses. Tras los cuales, nuevas e inexpertas manos eran destinadas a controlar las agotadas cosedoras automáticas. Una fría mañana de Marzo se pararon. Habían dado demasiadas puntadas, sin reparaciones ni descansos. Sencillamente dejaron de funcionar. El sastre no tenía dinero para reemplazar el utillaje y se vio forzado a cerrar Tijeras. 
Pocos días después una mano temblorosa llamó a la puerta de Cremallera. Ambos amigos se encontraron uno frente al otro. Los recortes de Tijeras, en su irreflexiva persecución del mejor precio, le habían condenado a la bancarrota. El paso firme de Cremallera, buscando la excelencia y la innovación, le convirtieron en una empresa de referencia en el sector. Aquel día sus vidas volvían a cruzarse. Uno triunfador, el otro necesitado de ayuda. Se fundieron en un abrazo y frente a una taza de café caliente hablaron durante horas, como aquellas noches que habían pasado en la posada de la señora Mesón. Hicieron planes de futuro, trabajaron juntos aprendiendo de la experiencia y sólo utilizaron las tijeras para recortar las finas telas de sus creaciones.
Moraleja: ¿calidad, I+D+i, trabajo duro y salarios dignos o recortes indiscriminados, pérdida de la capacidad de consumo y regresión?


Foto: Edurne Iza
Texto: Onintza Otamendi Iza
Puedes descargarte esta foto libremente. La única restricción es su venta y/o el uso lucrativo de la misma. No olvides que toda obra pertenece a su autor, haz un buen uso de ella.